Niegate a ti mismo, toma tu cruz y sígueme

Negarse a Sí mismo es no vivir sino que Cristo viva en ti, Jesús se negó a Sí mismo, ÉL no vivió el Padre vivió en Él. ÉL no habló sus palabras sino las palabras del Padre (Juan 12:49-50), no hizo las obras que Él quiso sino las que veía hacer al Padre(Juan 5:19). Negarse a si mismo es estar muerto; a tus pensamientos, a tus sentimientos y a tu voluntad. Es Amar a DIOS con todo tu corazón, con toda tu mente, con toda tu alma y con todas tus fuerzas. Por eso Dios a través de las pruebas (una vida de cruz) busca vaciarte de ti mismo y llenarte de ÉL. La cruz es el final de nosotros mismos, la cruz es lo yo no quiero, lo que no me gusta, los problemas se solucionan al estilo de Dios y como Él  quiere, Dios es Soberano. Negarse a si mismo es no  buscar gloria para uno mismo, es darle a Dios toda la gloria, toda la honra y toda la alabanza. En Filipenses 2:7 Pablo nos enseña que Jesús "se despojó a sí mismo", griego kenosis, que significa vaciamiento. Sí nuestro Señor se negó a sí mismo, sigamos su ejemplo para el bien de la humanidad.