PABLO DE PERSEGUIDOR A APÓSTOL

1. 

   Efrain Arturo Chavez Esparta

   13 de agosto cerca de Lima · Editado

   LIMA - PERÚ MIÉRCOLES 13 DE AGOSTO DEL 2014
   
   Gálatas 1:13-14
   
   "Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres".
   
   *** La autenticación de la labor ministerial paulina, y su procedencia celestial vía una revelación particular (que se verá corroborada por los apóstoles que fueron llamados a dicho ministerio antes que él, según Gá.2:2,7-9), ya fueron manifestadas en una forma clara, y ahora, Pablo se ocupará de relevar su pasado religioso, sus errores de apreciación, y su conducta criminal vindicativa de lapidaria factura. Alguien que ha sido liberado de su dominio satánico-religioso, no teme exponer su tortuoso pasado, como algo que hoy sólo merece su repudio y su más definitivo desdén, tras haberse persuadido de su error doctrinal y conductual, procediendo a exponer su miseria espiritual en medio de su riqueza religiosa ancestral ¡Tremenda paradoja! Espero que no nos encontremos en semejante situación; y si así fuera, tenemos el ejemplo paulino y la inmensa misericordia del Padre para gente como tal. ¡No temamos caer en los compasivos brazos del Padre eterno! (Dt.33:27a; Jos.2:11b).
   *** La expresión apostólica: "...en otro tiempo...", implica una situación en el orden temporal, en un momento específico que ha dejado de tener vigencia en el fluir paulino, en un voluntario desfase del espíritu que lo gobernara con un sadismo propio de la Inquisición de Torquemada, el mismo que se veía espoleado por los permisos sacerdotales de derechos religiosos internacionales (Hch.26:9-11), convirtiéndolo en el Atila de su época (por lo de "Azote de Dios") cabalgando en su corcel, "Incitatus" (Hch.9:1;22:4-5).
   *** Así, pues, el Perseguidor oficial de la Iglesia de Dios, y el Depredador principal de la Familia cristiana, dejó sus distintivos y sus criminales oficios para servir a Dios conforme al Nuevo Pacto (Hch.22:3-5) tras haber vivido uno de los "romances más intensos con su religión hebraica", asentada sobre muchas personas afligidas , azotadas, apedreadas, y muertas "en el nombre de la religión verdadera". Este era el testimonio de su vergüenza, de su oneroso pasado, de la tristeza interior que el Padre hubo de purgar, para devolverle a su alma el balance emocional, tornándole sensitivo y sometido a Dios para la salvación del mundo gentil, entre los cuales estamos muchos de nosotros hoy. Lo que Dios hizo con este hombre, marcó la historia de nuestras vidas de un modo indeleble, no tendremos cómo pagarle a Pablo todo el bien que para nosotros canalizó a través de su fe, habiendo disfrutado de ello por estos últimos dos mil años, en que la gracia (la Promesa de Matrimonio del Novio) debía verificarse para con aquella Novia que ansiosa aguarda su retorno para el "rapto" correspondiente, ligándose a Él eternamente (1Ts.4:15-17).
   *** El Perseguidor y Asolador (Arruinador, Arrasador, Destructor) de la Iglesia de Dios, nos comenta acerca de su condición, su posición y su identificación con el terrorismo religioso de su época (semejante a la del grupo Hamás en Palestina, y otros grupos de naturaleza recalcitrante y arábiga en las últimas décadas). La Inquisición, los yihadistas islámicos, las guerras religiosas (o "feligiosas" como un servidor las llama), los talibanes, etc; son las fieles demostraciones del celo religioso y asesino que justifica sus acciones contra el resto de la humanidad que no piensa como ellos, basados en sus celos religiosos, sus convicciones, y su absoluta certeza de estar interpretando a Dios en su "ira santa" contra los infieles. La extrema debilidad de aquellos dioses de humana facturación, los lleva a matar lo que no son capaces de redimir (La Bestia lo hará también) ¿Has visto el celo del que se adornan los religiosos que dividen una congregación? Y el odio reemplaza el amor fraternal, el rechazo reemplaza el abrazo; la acusación, las frases de bendición que antes nos merecieran los que compartían nuestra fe, condimentando ello con nuestras palabras de maldición y de cuestionamiento a su nueva posición religiosa, "evidentemente apóstata o herética" (según el pensar de cada uno respecto al otro) (Mt.24:10;1Co.1:12).
   *** Si son malos los talibanes, los palestinos, los judíos, los musulmanes ... y todos los "anes" que nos vengan a la memoria, ¿cómo nos vemos y sentimos los cristianos del siglo XXI? Los celos vindicativos nos contaminan a todos, y nos ponen agresivos contra los demás, mostrando un "odio santo", una "ira santa" y una "santa necedad" que nos coacta a "defender la fe que una vez fue dada a los santos"; que no tiene nada que ver con la epistola de Judas (no el Iscariote), sino con nuestra peculiar forma de juzgar las cosas con nuestro celo sin ciencia que postulamos como sabiduría ¡Ay, Padre!
   PASTOR EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 13/08/2014